Probablemente una de las cuestiones más importantes en materia de derecho familiar es la relativa a los testamentos y herencias. ¿Por qué? Por la sencilla razón de que hacer un testamento y repartir la herencia correspondiente entre los miembros de la familia es vital para determinar el destino de nuestro patrimonio y evitar los temidos conflictos entre los herederos. ¿No sabes cómo redactar un testamento y/o te preocupa la partición de la herencia? Entonces vamos a tratar de solventar todas las dudas que tengas al respecto.
Testamentos y herencias
Diferencia entre testamento y herencia
No; el concepto de herencia no se entiende sin el de testamento (y viceversa) pero aún así existen ciertas diferencias entre los conceptos de herencia y testamento; unas diferencias que debemos conocer para no caer en errores innecesarios de nomenclatura.
El testamento es el paso previo a la partición de la herencia, el documento firmado ante notario en el que un individuo expresa su voluntad antes de fallecer. ¿Qué contiene un testamento? Precisamente el reparto de bienes privativos y gananciales entre los herederos, así como los derechos y obligaciones de cada uno de ellos.
En cambio, el concepto de herencia hace referencia al acto jurídico mediante el cual el individuo transmite sus bienes, derechos y obligaciones a los herederos previamente escogidos en el testamento. La herencia es, por lo tanto, el legado del patrimonio de la persona que acaba de fallecer.